¡Salud! ¿pero por qué brindamos?

Se da en todas las clases sociales y fue y es tema y motivo en el arte, cuadros o músicas e incluso películas con brindis inolvidables. Por ejemplo, Casablanca (¿cuántas veces la vimos?) con Ingrid Bergman y Humphrey Bogart (Ilsa Lund y Rick Blaine). Dos copas de champagne, con Sam al piano; un brindis temible en Los Intocables de Eliot Ness by Brian de Palma, con Al Capone (Robert de Niro) y su botella; y la clásica desde hace muchos años, peli de la Navidad, Qué bello es vivir con James Stewart. Más una reciente película francesa de Laurent Tirard, que se llama Le discours, cuyo título en castellano es Brindis (2020). Un ejemplo musical es la ópera de Verdi, la Traviata y su bellísimo Brindis y en la pintura el cuadro famoso La bacanal de los andrios (1523-1526 de Tizziano). En fin, es mucho más y los animo a buscar… 
 
Hay brindis y brindis y también tradiciones. Por ejemplo, en España, la copa del final será la penúltima, porque la última es la que se bebe ¡antes de morir! Los checos brindarán por la salud de cada persona en la mesa (“na zdravy!“), aunque haya mucha gente en la fiesta. Al parecer en En Rusia los brindis son largos y les gusta coronarlos con un chiste. Últimamente se había puesto de moda en Argentina el Chin Chin…pero personalmente no me gusta. ¿Soy clásica?  Y así siguen tradiciones y costumbres. Ahora bien, se suele brindar por algún acontecimiento…pero desde cuándo y porque se brinda? Eso es lo que vamos a contar.
 
El hecho de brindis en sí mismo, probablemente provenga de las ofrendas que en la antigüedad se hacían a los Dioses. Un brindis histórico se afirma que fue el dedicado a Carlos V en 1527 y que al parecer pronunciaron los comandos de su ejército, alzando copas luego de tomar la ciudad de Roma y que fue justamente “Yo te lo Ofrezco” o ‘bring dir's'. Un gesto que se hizo costumbre después de una victoria y llego a la vida cotidiana.
 
Otras versiones (recordemos a los Borgia, por ejemplo) sugieren que comenzó como una precaución ante los bastantes comunes envenenamientos entre los altos mandos, por poder o por riquezas en los tiempos antiguos y aún en la Edad Media. Era muy fácil deshacerse de alguien molesto de esa forma. Y como prevención comenzaron a desearse ¡Salud! chocando las copas. ¿El motivo?, las copas eran chatas y al entrechocarlas, siempre se derramaba algo de líquido en la del vecino.
 
Envenenar con vino era fácil, por eso entre los griegos el anfitrión del banquete debía ser el primero en servirse el vino, levantar y mostrar su copa y beber de ella. Luego, ya se hizo costumbre el brindis y quizá desde aquellas épocas, generalmente la persona más importante o mayor, si se trata de una familia, es quien brinda con un simple ¡Salud!, que también incita a seguir bebiendo. Estamos cerca del Fin de Año y seguramente brindaremos con amigos y familias. Por eso también levanto mi copa ¡SALUD!